La firma Colombina comprará el negocio de dulces de la española Fiesta por 16,8 millones de euros.
Fuente: El Portafolio
La empresa colombiana, de tradición confitera, ganó el negocio “no sólo por el precio, que ha tenido gran relevancia en la decisión, sino también por comprometerse con todos los requisitos que fijaba la administración concursal”, informó ayer el socio-director de la administración concursal Data Concursal, Francisco Vera.
Vera citó, en concreto, el mantenimiento de todos los puestos de trabajo, la inversión en el primer año de un millón de euros en circulante y de dos millones en bienes de capital. “El alto precio de Colombina nos ha dado a entender su interés y su estrategia por hacer crecer a Fiesta en Europa, donde todavía no tiene presencia”, explicó.
Colombina se comprometió, además, a establecer un plan industrial para aumentar las ventas en 122% en los próximos tres años.
En la Información Relevante de la Superintendencia Financiera de Colombia, la firma compradora indicó que “Colombina aprovechará esta adquisición de activos para fortalecer su presencia en el mercado europeo, estimando ventas en el primer año de adquisición, por valor aproximado de 20 millones de euros”.
Resultados positivos en un mercado que decrece
Colombina, al igual que Fiesta, dedica su actividad principal a los dulces, golosinas y bombones, y es un referente en el mercado internacional. En el primer semestre creció 6 %, contrastando con los indicadores negativos de la industria.
Según Vera, “el precio de la operación se excedió de lo previsto al principio, cuando se fijaba en cinco veces el Ebitda y terminó siendo de diez veces”.
El proceso de venta ha sido novedoso en el mercado porque se realizó a través de un aplicativo web, lo que permite valorar las ofertas sin intervención de terceros ni de la propia administración concursal”, añadió.
EL PROCESO DE VENTA SE DIVIDIÓ EN DOS PARTES
Fiesta presentó en el 2014 su plan de liquidación tras solicitar el concurso de acreedores. La venta se inició en enero pasado y se dividió en dos partes: por un lado, se puso a la venta el negocio principal de caramelos (las marcas comerciales, productos y canales de venta); por otro, el activo inmobiliario (sedes en Alcalá de Henares, Madrid), cifrado en 6,7 millones, y cuya venta aún no se cierra.
Las otras dos finalistas elegidas en el último tramo del proceso de venta eran Indes Capital, de origen español, y Risi, también española y especializada en producción de ‘snacks’.