Birmania sigue empeñada en demostrarle al mundo que camina hacia una democracia genuina y concedió una nueva amnistía, la cuarta en los últimos diez meses, que ha liberado a los principales prisioneros políticos que aún estaban entre rejas. En total han sido excarceladas 651 personas. La mayoría, disidentes del régimen, cuyo gesto ha llevado a Hillary Clinton a anunciar que EEUU está dispuesto a intercambiar embajadores con Birmania, algo que no sucede desde 1990. “Este es un día trascendental para el pueblo birmano”, aseguró la secretaria de Estado norteamericana.
Location of Burma (green) within ASEAN (dark grey)
La Liga Nacional para la Democracia, liderada por la premio Nobel Aung San Suu Kyi, aseguraba que los 591 prisioneros políticos de su lista habían sido puestos en libertad, mientras que la Asociación de Asistencia a los Prisioneros Políticos Birmanos sólo había confirmado el nombre de 220 disidentes de los 1.547 que tiene contabilizados.
La Nobel Suu Kyi dice que los 591 presos de su lista han sido liberados
Periodistas, monjes críticos y antiguos miembros del Gobierno comenzaron a cami-nar libres. Algunos de los más esperados eran los activistas de la Generación del 88, como Min Ko Naing, Ko Ko Gyi y Htay Kywe, arrestados tras protagonizar las protestas de estudiantes de 1988, que se saldaron con 3.000 muertos. También salieron los líderes más importantes algunos, miembros del movimiento estudiantil de la Revolución Azafrán, que en 2007 sacó a los monjes a la calle para quejar-se por la subida de precios.
Entre ellos, destaca el monje U Gambira, detenido por liderar las revueltas de 2007 y cuya salud se encontraba muy deteriorada. También fueron liberadas Nilar Thein, Mar Mar Oo, Sandar Min, Thet Thet Aung y Thin Thin Aye, cinco activistas condenadas en noviembre de 2008 a 65 años de prisión por su participación en la Revolución Azafrán y símbolo de las mujeres encarceladas por el régimen.
Birmania inició un proceso de apertura democrática en noviembre de 2010 con la celebración de las primeras elecciones parlamentarias en 20 años y la formación de un nuevo Gobierno civil, aunque compuesto por antiguos generales, que tomó posesión en marzo.
“Este es un día trascendental para el pueblo birmano”, proclama Clinton
Desde entonces, se han emprendido reformas políticas, económicas y sociales; se ha legalizado a la oposición y rela-jado la censura, y se han dado pasos para acabar con el conflicto con las tribus que dura más de seis décadas, inclu-yendo un reciente acuerdo con los karen que pone las bases de un alto el fuego.
Birmania ha anunciado que celebrará unas elecciones legislativas parciales el 1 de abril, a las que se presentará Aung San Suu Kyi, después de que no pudiera aspirar a las anteriores al estar bajo arresto domiciliario.
La liberación de los presos es una condición de Occidente para levantar las sanciones, que afectan a exportaciones, inversión y ayuda al desarrollo. Pero el proceso de reforma no está del todo asegurado, como lo atestigua que la amnistía haya sido aprobada únicamente por el presidente del Gobierno, en vez de por el Consejo Nacional de Defensa y Seguridad, el principal órgano de decisión de Birmania.
EFE