Sony se ha embarcado en una aventura julioverniana a la que ha bautizado con el nombre de “La vuelta al mundo en 80 segundos” con el fin de promocionar uno de sus productos.
Este proyecto ha llevado a los realizadores del anuncio a seis países y siete ciudades diferentes del mundo: Londres, el Cairo, Mumbai, Honk Kong, Tokio, San Francisco y Nueva York, finalizando el recorrido alrededor del globo, tal y como hiciera Phileas Fogg (en vuelta al mundo en 80 días), nuevamente a orillas del Támesis.
Las tres semanas que duró el viaje han quedado resumidas en 80 segundos de vídeo en stop-motion, montado con un total de 640 de las fotografías tomadas en esas ciudades y que pasan por la pantalla a un ritmo de ocho por segundo.
La vuelta al mundo en 80 días del francés Julio Verne (1828-1905), fue publicada en Le Temps el 6 de noviembre de 1872.
Las peripecias del inglés Phileas Fogg y de su ayudante Jean Passpartout (pass par tout, es decir “Sirve” “Para” “Todo” ) constituyen uno de los relatos más extraordinarios producidos por la imaginación humana, y una de las joyas de la literatura de todas las épocas.
El viaje narrado comienza el 2 de octubre de 1872. Phileas Fogg, acompañado de su criado, trata casi todo el viaje de pisar exclusivamente territorio británico; cosa no muy complicada gracias a que el Imperio Victoriano inglés se encontraba en el período de máxima expansión.
Su viaje siguió el itinerario previsto en el The Daily Telegraph y que supuso la base para la apuesta.
Londres a Suez | ferrocarril y barco de vapor | 7 días |
Suez a Bombay | barco de vapor | 13 días |
Bombay a Calcuta | ferrocarril y elefante | 3 días |
Calcuta a Hong Kong | barco de vapor | 13 días |
Hong Kong a Yokohama | barco de vapor | 6 días |
Yokohama a San Francisco | barco de vapor | 22 días |
San Francisco a Nueva York | ferrocarril y trineo | 7 días |
Nueva York a Londres | barco de vapor | 9 días |
vuelta al mundo | total | 79 días |
Fragmento de La vuelta al mundo en 80 días
… ¿Esta misma noche?
preguntó Stuart.
Esta misma noche respondió Phileas Fogg . Por consiguiente añadió consultando un calendario del bolsillo : puesto que hoy es miércoles 2 de octubre deberé estar de vuelta en Londres, en este mismo salón del Reform Club, el sábado 21 de diciembre a las ocho y cuarenta y cinco minutos de la tarde, sin lo cual las veinte mil libras depositadas actualmente en la casa de Baring Hermanos os pertenecen de hecho y de derecho, señores. He aquí un cheque por esa suma.
Se levantó acta de la apuesta, firmando los seis interesados. Phileas Fogg había permanecido sereno. No había ciertamente apostado para ganar, y no había comprometido las veinte mil libras mitad de su fortuna sino porque preveía que tendría que gastar la otra mitad para llevar a buen fin ese difícil, por no decir inejecutable proyecto. En cuanto a sus adversarios, parecían conmovidos, no por el valor de la apuesta, sino porque tenían reparo en luchar con ventaja.
Daban entonces las siete. Se ofreció a mister Fogg la suspensión del juego para que pudiera hacer sus preparativos de marcha.