Mano amiga en España
Así es como se desarrolló el pasado diciembre la Feria de Servicios de las Asociaciones de Colombianos en Madrid, que tuvo como objetivo informar sobre las diferentes entidades que trabajan por el bienestar del extranjero, independientemente del país de origen. Estaban presentes 22 asociaciones que prestan servicio en las diferentes áreas: conflicto armado, cultura, discapacidad, emprendimiento, educación, desahucios, deporte, etc. Aunque todas con el mismo denominador común: ayudar.
Se encontró que en la última década nacieron varias con el fin de asesorar y socorrer a las víctimas del conflicto armado en el exterior, como AICODE(Asociación Iberoamericana para la Cooperación, el Desarrollo y los Derechos Humanos, y ASEVICOM (Asociación Europea de Víctimas del Conflicto Armado Colombiano). En cambio, Integrando raíces, apoya a las mujeres que están privadas de la libertad y son víctimas de la trata de blancas; la Asociación Estudio 40 y Mestidanza, promueven el arte colombiano; CASIC, asesora a las familias que pueden sufrir desahucios; Llantos y Risas, nació hace 6 meses y apoya a las mujeres que sufren violencia de género; y Alma Latina, es una entidad que se basa en proyectos educacionales para mejorar el rendimiento académico de los niños extranjeros en las aulas escolares.
Sin embargo, la Asociación María José Guadalupe, Invidentes de Colombia, es innovadora porque sale del tópico “asociación que ayuda a inmigrantes”, y focaliza su trabajo en sensibilizar, educar y visibilizar la invidencia de los niños de origen colombiano en Madrid, donde la adolescente que da nombre a la entidad habla 4 idiomas, toca varios instrumentos musicales, y su discapacidad visual no es un impedimento para dirigirla a nivel internacional.
Otras de las asociaciones presentes: ACULCO (Asociación Sociocultural y de Cooperación al Desarrollo por Colombia e Iberoamérica); Asociación Club Deportivo Fútbol y Mucho Más; Asociación Amigos Mira; Asociación Red Colombia; AsCuidadores; Nativos de Macondo; ASOLABLER; El Sembrador, entre otras, prestan asesoría legal, apoyo alimentario, retorno voluntario, proyectos de comercio justo, talleres de formación, ofertas de empleo, etc.
No obstante, con los recortes en las subvenciones se cerraron varias de estas organizaciones. Si bien, la organización comunal en algunas zonas ha permitido que varias sobrevivan, como Alma Latina, que por la unión, el trabajo de padres, vecinos y amigos se mantiene activa en pro de la comunidad.
Ahora, el apoyo español se agradece, y mucho, porque han sido numerosas las personas, dígase colombianos, ecuatorianos, peruanos, dominicanos, marroquíes, rumanos, nigerianos, etc., que se han visto beneficiadas de estos servicios. Pero, no es suficiente, es necesario que los países de origen también apoyen económicamente, y no se quede la “ayuda” en conclusiones de mesas de trabajo plasmadas en un folio blanco, que al cabo de 4 años se quema con un mechero.
Mundiario.