Su puesta en marcha hoy coincide con el inicio del mes sagrado musulmán de Ramadán
El reloj más grande del mundo se ha puesto en marcha hoy en la Meca, en Arabia Saudí. Las agujas gigantes han comenzado a recorrer los 43 metros de diámetro de su esfera pasado un minuto de la media noche. El Ramadán, el mes más sagrado del calendario musulmán, ha comenzado en ese mismo instante.
Las enormes esferas -una en cada cara de una torre en construcción- se encuentran a más de 400 metros del suelo. La hora que marca se puede ver desde toda la ciudad e incluso a 25 kilómetros de distancia.
La edificación en la que se encuentra se sitúa enfrente de la gran mezquita de la Meca, hacía la que se dirigen los musulmanes de todo el mundo en sus cinco oraciones diarias. Cuando se termine de erigir será el segundo rascacielos más alto del mundo, y el hotel con más metros cuadrados de superficie, construido para mejorar las posibilidades de alojamiento los más de cinco millones de peregrinos que visitan la ciudad al año.
La única de las cuatros caras terminada está decorada con más de 98 millones de piezas de mosaicos de cristal de colores y la inscripción “Alá”. Su construcción corre a cargo del consorcio privado saudí Binladen, que ha encargado el diseño de la torre a arquitectos alemanes y suizos.
Las autoridades inaugurarán oficialmente el reloj dentro de tres meses. Esta tarde ya hará sin embargo la llamada a la oración del atardecer, que marca la ruptura del ayuno, acompañada de un espectáculo de luces en el cielo.
Arabia Saudí espera que el nuevo reloj establezca la hora de la Meca, muy presente en el mundo musulmás, como alternativa horaria a la del meridiano Greenwich, según informa AFP.
Otros relojes que baten récords
Los dos relojes de cuco más grandes están en Schonach, un pueblecito de la selva negra de Alemania. Son dos chalets típicos de la zona, versión a escala real de las casas en miniatura en las que a veces se encastran estos relojes, de cuyas ventanas salen los pajaritos cantores que marcan las horas a la voz de “cu-cu”.
La ciudad sueca de Pajala entró en el libro Guinness de los récords en 1996 por tener elreloj solar más grande del mundo, con un diámetro de 38,33 metros. La ciudad se encuentra a 70 kilómetros del círculo polar ártico, por lo que en los meses de verano el sol da una vuelta completa sobre el horizonte.
Los dos relojes de arena de mayor tamaño son la Rueda del Tiempo en Budapest y el del Museo de Arena de Nima, en Japón, con una altura de ocho y seis metros respectivamente y un tiempo de recorrido de un año.
El reloj astronómico de Praga es el más antiguo de este tipo, con algunas partes que datan de 1410. Se encuentra en la pared sur del ayuntamiento de la Ciudad Vieja, y tiene un cuadrante astronómico, que indica las horas y las posiciones del sol y la luna, unas figuras animadas y un calendario circular.
AFP.